El Ayuntamiento precintó el pasado miércoles la asociación cannábica conocida como La Maca, establecida en el barrio de Sants, argumentando que el colectivo de consumidores carece del permiso municipal para sus actividades, es decir, consumir marihuana en el ámbito privado y sin ánimo de lucro.

La medida que ejecutó el Distrito de Sants apoyado por informes técnicos y de la Guardia Urbana responde a la ausencia, entre otros aspectos, de un extractor de humos que se exige a todos los clubes de fumadores existentes en la ciudad, según aseguraron fuentes municipales. Unas carencias de las que fueron advertidos con anterioridad pero que no hicieron que se detuviera el ritmo del local.

La clausura, en todo caso, será llevada a los juzgados por los responsables de La Maca, quienes ayer ultimaban un recurso contencioso-administrativo contra el cierre que será presentado este mismo viernes. Según la abogada de la asociación, Marta Carreras, el objetivo es que les permitan reabrir en cuestión de días al entender que el cierre se ha llevado a cabo sin esperar a la decisión judicial respectiva. Además, recordó que las advertencias previas del Ayuntamiento se habían hecho denunciando el cultivo y la venta de marihuana en su interior, un extremo que consideran del todo falso. «La asociación no vende marihuana ni la cultiva en su interior. Se trata de un consumo compartido».

El precinto del local, situado en el 109 de la calle Miquel Àngel, ha dejado en evidencia, no obstante, la existencia de un conflicto abierto entre los colectivos de autoconsumo de cannabis y las administraciones. Así, en el caso de La Maca, sus gestores llevan tiempo denunciando la «presión policial» a la que les ha sometido la Guardia Urbana hasta lograr su clausura.

Así lo señala José Afuera, uno de sus portavoces, quien recuerda que hasta conseguir el precinto definitivo agentes de policía han llegado a «extorsionar» y a someter a «vejaciones» en la vía pública a algunos de sus socios. Unas denuncias que incorporarán a uno de los cinco procesos que tienen abiertos por la vía penal.