Se necesita una reforma urgente
Las draconianas leyes sobre drogas son la principal causa del VIH/SIDA fuera de África
A mediados de julio, expertos y responsables de formulación de políticas de todo el mundo se dieron cita en Viena para la XVIII Conferencia Internacional sobre SIDA con el objetivo de evaluar las actuales tendencias en el tratamiento y la prevención del VIH/SIDA. A pesar de la gran atención que se da a este problema, los países siguen manteniendo unas draconianas leyes sobre drogas que están aumentando la propagación de la enfermedad.
Numerosas organizaciones que trabajan sobre el SIDA, los derechos humanos y la reforma de las leyes de drogas, así como destacados científicos, están haciendo un llamamiento para que se tomen acciones urgentes para modificar las actuales leyes sobre drogas y adoptar enfoques fundamentados en pruebas científicas con respecto al tratamiento y la prevención de las drogas y el VIH/SIDA e invertir esta tendencia.
Según las últimas estadísticas, el consumo de drogas inyectadas representa aproximadamente uno de cada tres nuevos casos de VIH fuera de África. En algunas regiones donde el VIH se está propagando a gran velocidad, como Europa Oriental y Asia Central, la prevalencia de VIH entre las personas que se inyectan drogas puede llegar al 70 y al 80 por ciento. Si no en todos, en la mayoría de estos países están prohibidas las medidas de prevención basadas en la evidencia –como los programas de intercambio de jeringuillas y los tratamientos de sustitución de opioides–, con lo que se exacerban los índices de nuevos contagios.
La Sociedad Internacional de SIDA (IAS), el Centro de la Columbia Británica para la Excelencia en VIH/SIDA (BC-CfE) y el Centro Internacional para la Ciencia en Política de Drogas (CICPD) encabezan una iniciativa para cambiar estas leyes y exhortan a que se tomen medidas basadas en pruebas empíricas para tratar y prevenir el consumo de drogas y, a la vez, la propagación del VIH/SIDA. Para alcanzar este objetivo, las organizaciones detallan sus argumentos y los pasos que se deberían seguir en lo que llaman 'La Declaración de Viena'. La Declaración cuenta con el apoyo de organizaciones y personas de todo el mundo, entre los que se encontrarían:
• Fernando Henrique Cardoso, ex presidente de Brasil
• Ernesto Zedillo, ex presidente de México
• César Gaviria, ex presidente de Colombia
• Profesora Françoise Barré-Sinoussi , premio Nobel de Medicina por su descubrimiento del virus del VIH
• Dr. Michel Kazatchkine, director ejecutivo del Fondo Mundial
Incluso en los países que ofrecen servicios de tratamiento de drogas, las agresivas prácticas de aplicación de la ley alejan a los consumidores de drogas de estos servicios y los empujan a entornos donde hay un alto riesgo de contagio del VIH. Por tanto, para que estos servicios de salud pública sean eficaces, es necesario suavizar las prácticas de aplicación de la ley y fomentar entre los consumidores la garantía de que no serán perseguidos por la justicia mientras estén en tratamiento.
Además, es necesario presionar más a los países para que pongan fin a los programas de tratamiento que violan los derechos humanos en un intento velado por presentarse como promotores de medidas de reducción de daños. En algunos países, se obliga a los consumidores de drogas a seguir programas que incluyen la tortura, el trabajo forzado y un trato degradante.
La situación se debería tratar como un problema de salud pública, no como un 'problema de drogas'. Súmese a los miles de personas que están firmando la Declaración de Viena y enviando a nuestros dirigentes políticos un potente mensaje a favor del cambio en el statu quo.
http://www.ladeclaraciondeviena.com/