Entre Guatemala y Washington
Una historia de presiones y convicciones
Domingo, 11 de marzo, 2012
Otto Pérez Molina no deja de subir la apuesta. El presidente de Guatemala está convencido de que regular la producción, traslado y comercialización de drogas es la salida a los altísimos niveles de violencia que produce la prohibición. Primero envió a su canciller Harold Caballeros a debatir el tema ante la secretaria de Estado Hillary Clinton, el 21 de febrero pasado. La semana pasada, en Honduras, mientras el vicepresidente norteamericano Joe Biden firmaba acuerdos para una puesta común en la lucha contra el crimen organizado dedicado al tráfico de drogas en Centroamérica, Pérez Molina insistió con la regulación de las drogas.